EMPRESAS

Calidad de aplicación: Cómo asegurar una mezcla homogénea y evitar la incompatibilidad del caldo.

En el inicio del año es fundamental proteger los cultivos estivales que se encuentran implantados y transitando sus diferentes etapas de desarrollo. Con el objetivo de controlar enfermedades y plagas que pueden afectarlo, es esencial utilizar productos eficientes, que lleguen al objetivo y aseguren un resultado óptimo.

La clave es el monitoreo periódico para identificar los riesgos potenciales que pueden afectar el cultivo, mensurar el nivel de incidencia o daño, considerar sus condiciones ambientales y de crecimiento, así como seleccionar las herramientas de mayor eficacia en el control de enfermedades y plagas. Por ese motivo, FMC cuenta con un portfolio muy tecnológico y completo para tal fin, donde se destaca en el control de enfermedades en soja ONSUVA ™, un nuevo producto en base a carboxamidas, con destacada performance en el control de enfermedades de fin de ciclo (EFC).

Además, para el control de plagas, específicamente defoliadoras, la referencia es CORAGEN EVO ®, de lanzamiento reciente, siendo la evolución del conocido Coragen tradicional con mejoras importantes a nivel de formulación y concentración de activo. Para todo esto es sumamente importante entender cómo aplicamos los productos, lo que condiciona fuertemente la eficacia de los tratamientos a campo. “El mejor producto mal aplicado no será el mejor tratamiento, ya que pierde eficiencia y finalmente rentabilidad para el productor”, señala el ingeniero agrónomo Emiliano Fernández, Coordinador de Servicio Técnico de FMC.

 

EL OBJETIVO DE LLEGAR AL BLANCO

En esta época del año, las aplicaciones suelen ser extremas por altas temperaturas y baja humedad relativa, originando un valor de DELTA T (∆T) elevado (superior a 8), donde la susceptibilidad de los productos aplicados a la evaporación es muy importante. En esta línea, el Ing. Agr. Diego Oliva, especialista en calidad de aplicación de fitosanitarios, menciona que el tamaño de gotas logradas merece especial atención porque permite realizar un balance entre el número de impactos logrados, la susceptibilidad a evaporación/deriva por gotas muy pequeñas y la tasa de recupero de producto (dosis real depositada en el blanco de acción del producto).

“Se trata de un concepto no tan difundido, pero de suma importancia a la hora de relacionar la dosis activa recomendada para la aplicación de un fitosanitario y la dosis efectiva de llegada al blanco, donde sorprendentemente en muchos casos la dosis se encuentra muy por debajo de las dosis activas recomendadas, llevando a exponer a la plaga a subdosis con pérdidas considerables en la eficacia de control esperada y el riesgo de generación de resistencia en las sucesivas campañas”, cuenta el experto Diego Oliva. Con este indicador (tasa de recupero) se pueden analizar los efectos de distribución de la cortina de aplicación y la variabilidad en los resultados biológicos logrados, considerando cuánta dosis está llegando al objetivo.

Con base en esto, FMC se especializa no solo en la herramienta de control, sino también en su recomendación de aplicación y el uso de adyuvantes para garantizar el éxito de la aplicación en las variadas condiciones que se pueden encontrar los cultivos en las distintas regiones agrícolas.

 

LA IMPORTANCIA DE ESTABILIZAR LA MEZCLA

Para lograr la mejor aplicación en el campo, BIOFUSION es un aliado del productor, buscando contribuir a obtener el mejor resultado en la protección de cultivos. Se trata de un producto donde la base de su funcionamiento es generar una emulsión del caldo de aplicación, con gran poder de bio-encapsulado que protege de manera física los activos. “Este innovador producto permite disminuir las interacciones entre los activos, así como también con diferentes partículas como cationes Ca y Mg que puede contener el agua e inactivar los distintos productos. Genera una aislación física, encapsulando los activos y los carbonatdos dentro de los LIPOSOMAS de Biofusion, para que no interactúen entre sí”, destacó el Ing. Agr. Fernández.

BIOFUSION tiene un gran aporte en la estabilidad de mezcla del caldo de aplicación, generando la mencionada emulsión, reduce el potencial de evaporación otorgando mayor peso a la gota asperjada, aumenta la penetración y traslocación de los activos en la planta. “Es un cofactor que no genera efecto lupa, fenómeno de gran importancia para esta época del año. Es decir que, si vamos a invertir en productos de alta tecnología como ONSUVA™ o CORAGEN EVO® para proteger el cultivo, lo que menos queremos es tener algún tipo de riesgo por manchado de hojas originado por el adyuvante/aceite utilizado y condiciones extremas de alta radiación y temperatura. BIOFUSION no genera la degradación de la cutícula de la hoja para el ingreso de los activos, por ende, no mancha o no genera microlesiones”, agregó el Coordinador de Servicio Técnico de FMC.

Otros atributos que complementan la acción de BIOFUSION y lo hacen un aliado para garantizar la calidad de aplicación son que reduce el potencial de producción de espuma, es un producto humectante que mejora el mojado foliar y, por ende, la llegada de los activos al blanco y un tema no menor: es un producto 100% de origen natural.

 

MOMENTO DE APLICACIÓN / DENSIDAD DE CANOPEO

Es importante considerar también el momento en el desarrollo fenológico del cultivo donde se requiere realizar la intervención y correlacionado con esto la densidad del canopeo; cuanto más denso, mayor será la dificultad para llegar a depositar la dosis requerida de activo en los tercios medio e inferior, que justamente suelen ser los estratos con mayor proliferación de enfermedades y plagas, requiriendo especial atención a la hora de configurar la pulverizadora para alcanzar los mismos con la dosis adecuada.

“En FMC contamos con un equipo técnico distribuido estratégicamente en toda el área agrícola con el fin de brindar a los productores, asesores y distintos actores de la cadena productiva soporte de alta calidad en el uso y técnicas de aplicación de nuestros productos”, comenta el Ing. Agr. Fernández, quien aclara que el fin del trabajo de la compañía es lograr alto nivel de eficiencia en la protección de cultivos, generando beneficios adicionales para los productores y preservando el ambiente con prácticas efectivas y seguras.