El 5 y 6 de octubre del corriente año, el CEO de CONECAR, Roberto Guercetti, viajó al estado de Nuevo León, México, para exponer en el Foro Internacional de Negocios Bovinos Carne 2017.
Representar a Argentina en un marco internacional, es una responsabilidad empresarial y personal de relevancia. El congreso, con oradores de distintos países, enmarcó la situación global de la ganadería, con obvias incursiones en los complementos agrarios e industriales, que forman parte de la gran cadena de ganados y carnes.
Comparto en esta nota mi exposición sobre el futuro de la ganadería argentina y el impacto global que tendrá en la próxima década.
La ganadería en la Argentina, con picos de exportación de 700.000 t en 2008 y con un consumo de 70 kilos h/ año, descendió en 2015 a un piso de 100.000 t. Acompañado con 55 kg de consumo H/año. Las estadísticas son contundentes y dejan claro que cerrar las exportaciones, no es herramienta válida para proteger la mesa de los argentinos.
El daño perpetrado por la administración popular y nacional, dejó secuelas en todos los frentes. Se perdieron 10 millones de cabezas, y el peso de faena es el mínimo del mundo, equivalente a menos de la mitad del peso de faena de EEUU. Sin duda, la naturaleza es neutral y los resultados son consecuentes a las acciones.
La idea no es “llorar sobre la carne derramada”. Presentar las nuevas credenciales, pedir disculpas y poner las luces altas; a eso fuimos al país azteca. Nueva Argentina, nueva ganadería: recomposición de stock, mayor peso de faena, eficiencia productiva, reducción de impuestos, previsibilidad. Recomponer las relaciones internacionales públicas y privadas.
La demanda mundial de carnes- proteína de origen animal- por aumento de población y cambio de dieta global, con epicentro en la región Asia-Pacífico, son los ejes en los que se sustenta la oportunidad única de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay en materia de agro alimentos.
Con todos los números comprados, América del Sur tiene la oportunidad de ser parte de la solución de los dos grandes temas del futuro inmediato: alimentos y energía.
El impacto positivo que produce el fenómeno de la era moderna, no solo refiere a ventas e ingresos de divisas. La cadena de ganados y carnes, involucra al campo como eje central, pero además genera un círculo virtuoso. La industria alimenticia humana, en los procesos, deja subproductos para fabricación de dietas para animales. De igual forma, la industria de los biocombustibles en la extracción de alcohol y aceites, genera subproductos de alto valor nutricional para alimentación pecuaria. El circuito continúa en la industria frigorífica y cadena comercial, consumo y exportación. El círculo virtuoso genera trabajo, inclusión con desarrollo.
Orientando la conferencia a un enfoque global de comercio de carnes, el escenario actual se destaca, basado en las nuevas expectativas para la actividad.
Asimismo, es necesario comprender desde la Argentina y desde la región Mercosur, que el consumidor tiene nuevas exigencias; que los países importadores instrumentarán medidas proteccionistas y lógica comercial, en favor de los productores locales.
Medio ambiente, trazabilidad, inocuidad, bienestar animal, manejo de desechos, uso de antibióticos, todos se convertirán en barreras para-arancelarias, así como calidad, marmóreo, terneza y sabor. Los productores de ganado, debemos ser productores de carne de calidad certificada.
Estamos ante un mundo nuevo, globalizado y comunicado, donde prima el intercambio de conocimientos mediante congresos, seminarios, viajes de capacitación. Un mundo que en las últimas 3 décadas, incorporó tecnología como nunca antes; vivió avances que no habían visto generaciones enteras; y que en los próximos años, puede sorprender con cambios disruptivos, inimaginables. Cambios que surgirán, sobre todo, desde la ciencia y la biotecnología. La modificación genética puede lograr avances que significarían producir alimentos y energía donde hoy no es posible, elevar y duplicar rindes en las cosechas, incorporar medicina a los alimentos, desarrollar procesos y productos que hoy no existen.
El cierre de la conferencia dejó un mensaje desde Argentina hacia el mundo. Concluyó que no sólo agua y tierra. Es necesario destacar la importancia de los RRHH, la capacitación y concientización. El saber hacer, es condición excluyente. Toda la información debe estar disponible desde cualquier punto del globo y en tiempo real. Incorporar tecnología hace la diferencia. Debemos levantar la vara. Los países que entiendan y actúen con las reglas de los nuevos tiempos, serán los referentes del siglo XXI. Argentina está en el mejor de los escenarios. A pesar de arrancar desde atrás, tiene el mejor auto, y el mejor piloto. Producimos alimentos y energía, imprescindibles y escasos.
Una sola salvedad: Hay que trabajar, recuperar la confianza. En lo público, desde las gestiones del presidente, con mensajes explícitos sin cadena nacional, con hechos concretos. Son mensajes permanentes al mundo. Desde lo privado, con la presentación de CONECAR en el foro internacional de México. Mientras tanto, en Argentina, recibimos a delegaciones de todos los rincones del planeta. Argentinos por el mundo. El mundo por Argentina. Vientos de cambio sin duda.
Roberto Guercetti · Presidente/CEO Conecar