Hay 2 M de ha en condiciones regulares y 670.000 en malas de las que ya se consideran perdidas 185.000. Se perdió el 30% de la producción que se esperaba a la siembra.
Fin de semana con lluvias
Se esperan precipitaciones de moderada a fuerte intensidad que se mantendrán hasta el lunes 28 inclusive.
“Se esperan lluvias más generalizadas y precipitaciones de variada intensidad en el centro del país”, comenta José Luis Aiello, Dr. en Cs. Atmosféricas.
La soja de la región núcleo ya perdió el 30% de su potencial productivo
La siembra largaba en la región en octubre del 2021 con un horizonte productivo de 17,7 Mt. Pese a ser la siembra más baja de los últimos 14 años, el alto nivel tecnológico aplicado al cultivo apuntalaba la posibilidad de alcanzar los 40 qq/ha en soja en la región. La estimación realizada esta semana da por el piso estos números. Con una siembra de 4,45 M de ha, el rinde estimado es de 29 qq/ha, rinde que coincide con el del ciclo 2017/18. Este ciclo junto al 2008/09 marcan los dos mayores desastres productivos de Argentina de los últimos 15 años. En este momento, se estiman que hay 2 M de ha en condiciones regulares y 670.000 ha en malas de las que ya se consideran perdidas 185.000 ha. Con estos guarismos, el número de producción es de 12,4 Mt, un 30% menos de lo que esperaba a la siembra. De esta manera será la producción más baja de los últimos 14 años. Respecto a lo que se estimaba 3 semanas atrás, esto significa un recorte de 1,4 Mt. Lamentablemente, con el 55% de la soja de la región en condiciones regulares a malas, es muy probable que siga realizándose ajustes negativos.
Llegaron las lluvias, pero no fueron para todos y la sequía alcanza al 70% de la región núcleo
En la primera imagen puede verse el resultados de las lluvias acumuladas de febrero hasta el 24 en la región pampeana. La franja oeste ha sido favorecida con algunos sectores que han logrado acumular 100 mm o más, caso del sur de Córdoba, o el extremo sur de Santa Fe, o parte del centro oeste de Buenos Aires o sectores de La Pampa.
En la franja central, en la región núcleo, la imagen de las lluvias de la última semana (las del fin de semana y las de las últimas horas) muestran que el oeste ha recibido lluvias significativas de 60 a 30 mm. Estas representan casi el 50% de la oferta hídrica acumulada hasta ahora en febrero, pero han llegado recién en la tercera semana del mes. También se ve la gran heterogeneidad y que en el territorio santefesino los registros estuvieron por debajo de los 30 mm, sobre todo en los alrededores de Rosario. Lamentablemente, pese a las lluvias, el área con reservas escasas y sequía ha vuelto a expandirse y alcanza al 70% de la región núcleo. Para revertir estas condiciones y torcerle el brazo a la sequía en el norte de la región harían falta 100 a 140 mm.
¿Cuál es la situación de la soja de primera en la región?
Se duplicaron los cuadros en condiciones malos y subieron los regulares pese a las lluvias: de un 7% pasó a un 15% el área de soja de primera mala y de 38% a 45% la regular en los últimos 7 días. Y como suele pasar en estas campañas, hay una enorme variabilidad de condiciones de soja de primera, sobre todo en el área del centro sur de Santa Fe. Hay zonas aisladas, como islas beneficiadas por un extra de milímetros en extensas zonas castigadas por la falta de agua. El Trébol y Carlos Pellegrini Cañada Rosquín están entre esos casos afortunados y podrían alcanzar los 40 qq/ha. A pocos kilómetros, la otra cara, Cañada Rosquín, hay mermas de rinde de un 40% por la mala condición del cultivo. En gran parte de los alrededores de Rosario, la altura del cultivo no supera los 40 centímetros, “si llueve puede recuperar algo de peso, pero la ganancia va a ser muy poca, otros podrían tener alguna reacción y mejorar el número de chauchas pero. Pero en muchos otros, nada”, advierten. Estiman rindes de 17 a 25 qq/ha. Claro, lo dicen pensando en una lluvia de más de 50 mm que no se ha producido y las chances son ahora para el domingo. Hacia el sur provincial, como en Bigand, se observa caída de vainas y lotes con sectores de plantas totalmente secas. Aun con buenas lluvias, el aumento de rendimientos será muy bajo. Se espera un promedio de 20 qq/ha. En Rojas, en el noreste bonaerense, se requieren al menos de 30 a 40 mm para que no continúen las caídas de rendimiento. Allí, el 70% de los lotes está entre regular a malas condiciones. Hacia el este cordobés, la oleaginosa de primera logró recuperarse tras las últimas lluvias, pero presenta daños en el potencial. La contracara sigue siendo el noroeste bonaerense. En Gral. Pinto, el cultivo se encuentra en muy buenas condiciones y podría alcanzar 35 quintales de promedio, aunque el rinde fluctuaría entre 22 a 48 qq/ha.
Maíz temprano: lotes que se vuelcan y rindes por el piso
El avance ya es del 22% porque muchos se están adelantando a cosechar con humedades por encima de los límites de comercialización porque los lotes se están volcando. Los rindes cosechados hasta ahora no son nada buenos. En suelos costeros de Cañada de Gómez arañan los 30 qq/ha y en otros cuesta alcanzar los 50 qq/ha. Los asesores dicen que: “los camiones se llenan al tope, pero no pesan”; la sorpresa es que el peso es inferior a lo que esperaba. En Cañada Rosquín, ya levantaron el 30% del maíz temprano: los rindes son un 50% inferior a la anterior campaña. En Rojas los primeros lotes trillados son los peores y están arrojando 40 qq/ha. Pero lo que sigue tampoco es bueno, porque esperan que la media zonal sea de 60 qq/ha. En El Trébol estiman mejores rindes, entre 80 a 90 qq/ha, al igual que en Monte Buey con 75 a 85 qq/ha, pero son productividades muy inferiores a las que se manejan en el área.
¿Qué se planifica para el trigo 2022/23?
En realidad la pregunta debería ser ¿el productor está planificando la siembra triguera? Y la respuesta es no, porque los productores están muy preocupados por esta campaña gruesa en la sigue faltando agua y no saben ciertamente como van a rendir los lotes. Por eso dicen que “solo después de que se tengan los números finales de ésta campaña podrán evaluar la factibilidad económica de afrontar un cultivo u otro”. O sea: quieren saber cuánta plata dejará la gruesa 2021/22 para invertir en el ciclo que viene porque habrá muchas decepciones y deudas por rindes que estarán entre el 20 y el 70% de lo que se planificaba a la siembra. Pero hay otro problema de fondo, los asesores señalan que la otra variable definitoria será el agua disponible en los perfiles a la siembra, más allá de los precios de los insumos o del cereal. “Si no se producen lluvias que recarguen los suelos no vamos a sembrar”. Y la afirmación es tajante porque, como comentan desde Monte Buey, “el productor tiene muy presente la seca de hace dos campañas atrás y no se va a jugar a esperar lluvias durante el invierno que son poco probables”. Entonces, ¿cuantos milímetros deberían dejar las lluvias otoñales? Los técnicos coinciden en la respuesta: “desde hoy a finales de mayo deberían llover 200 mm para considerar sembrar”. Con un evento “La Niña” extendiéndose con una probabilidad del 77 % hasta marzo-mayo de 2022 y una transición a la neutralidad, con un 56 % de probabilidad durante mayo-julio 2022, Argentina no tiene las mejores cartas en la mano para recibir el agua necesaria para sembrar 7 M de ha esta vez.