Para el analista Enrique Erize, los productores tienen que “colgarse de Chicago” para aprovechar el horizonte alcista que muestran los granos y evitar una probable suba de retenciones a nivel local.
Producir cultivos de invierno, como las legumbres, no puede desconectarse de lo que son los cultivos de verano; principalmente, soja y maíz.
Dr. Enrique Erize ( Nóvitas S.A.)
Por eso, en la jornada de actualización técnica y comercial de legumbres secas que se desarrolló en Córdoba, el socio de la consultora Nóvitas, Enrique Erize, expresó su visión sobre la realidad actual y futura de los mercados de granos, qué puede esperarse en materia de precios y cuáles podrían ser las mejores estrategias que adopten los productores.
Erize estructuró su charla en dos planos, uno internacional y el otro, local. Sobre el primero, fue muy optimista. Sobre el segundo, todo lo contrario.
Panorama
Desde su punto de vista, hay tres grandes factores que auguran un escenario alcista tanto para la soja como para el maíz.
El primero, es la posibilidad de un acuerdo que acabe con la “guerra” comercial entre Estados Unidos y China. “Donald Trump dijo la semana pasada que están llegando a un acuerdo. Ya lo dijeron tantas veces que hay que tomarlo con pinzas. Pero aparentemente se está avanzando y eso empujaría a los precios”, indicó.
El segundo es la peste porcina en China, que si bien muchos operadores lo interpretan como un factor bajista, ante la posibilidad de que el gigante asiático reduzca fuertemente su demanda de soja para producir las harinas que alimentan a su menor stock de cerdos; Erize interpreta lo contrario.
“Es cierto que China va a demandar menos soja, pero los chinos siguen siendo 1.350 millones que no van a volver al arroz. Por eso están aumentando de manera muy fuerte las importaciones de carne, tanto porcina como vacuna. Y para producir esa carne, se necesitan soja y maíz. Es decir, los granos que compre China los comprará otro. Es un juego de suma cero”, resumió.
Por último, citó a los inconvenientes climáticos que viene atravesando la producción agrícola estadounidense y que, según Erize, no están siendo reflejados fielmente por Erize.
“Los americanos son fanáticos de las estadísticas, se pierden sin ellas. Y en este caso, no hay estadísticas de semejante retraso en la siembra como ocurrió este año. ¿Cuándo les pasó esto? Nunca. Entonces, no hay parámetro para saber qué puede pasar. Sin estadísticas están perdidos, por eso el Usda no termina de reflejar el recorte productivo que van a sufrir”, dijo el consultor.
Esta menor cosecha que debería esperarse en Estados Unidos no se refleja aún en los mercados porque hay mucha oferta por las excelentes producciones que tuvieron el último año Argentina y Brasil. En cambio, para febrero este efecto se terminará y ahí Erize observa un escenario de subas. “El productor tiene que mirar la coyuntura sabiendo que el mercado internacional tiene viento a favor entre febrero y mayo del año que viene”, agregó.
Retenciones
En lo que respecta al mercado doméstico, el pesimismo que expresó Erize tiene que ver con la posibilidad de que se incrementen las retenciones.
“Es altamente probable un cambio de gobierno, y aunque no lo haya, si gana Macri lo lógico sería que se actualicen las retenciones por la suba del dólar. Si gana Fernández, una suba más profunda. Con lo cual, el consejo es que este año, más que nunca, hay que hacer buenas ingenierías comerciales”, dijo Erize.
En concreto, recomendó tres opciones: vender en los mercados de futuros locales y comprar “calls” en Chicago, adquirir “puts” en Matba-Rofex, o hacerse de basics en Chicago. “La idea es colgarse de Chicago y sacarse el riesgo local de encima. El mercado internacional está bueno y en el local lo más probable es que te pongan trabas. Es la mejor manera de defender tu patrimonio”, sostuvo Erize.