ECONOMIA

Se agrava la tendencia a la primarización

Por Ing. Agr. Guillermo García (Vicepresidente Primero de CIARA)

Distintos reportes oficiales sobre la molienda de oleaginosos (principalmente soja) han circulado haciendo relevancia que en el mes de junio pasado se han industrializados 9 de cada 10 toneladas (considerando molienda más exportación de poroto) como indicador relevante de performance industrial y de la no primarización del complejo exportador.

Es estadísticamente erróneo y falaz utilizar aleatoriamente un mes para arribar a conclusiones que pueden generar confusión o brindarnos datos falsos para radiografiar una tendencia. Extrapolando hasta el absurdo, en el mes de febrero de 2018 el mismo indicador nos diría que se industrializaron 9.97 de cada 10 toneladas, pero la molienda fue solo 2.376.000 toneladas (un mes de molienda relativamente bajo dado que es empalme de cosecha).

En el informe semanal de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) Nº 1914 del 19/07/2019 se presentó un trabajo de simulación sobre posibles escenarios de exportación de soja si no existiera un complejo industrial oleaginoso en la Argentina, lo cual también generó debate en medios y redes del agro.

Debajo de ese artículo se incluyó un trabajo de actualización de la encuesta de capacidad de molienda instalada en la Argentina que es un trabajo periódico que la BCR realiza desde las épocas del Dr. Rogelio Pontón, quien era un exhaustivo seguidor del desarrollo del Complejo Oleaginoso Exportador y sus necesidades logísticas.

En este trabajo, su discípula Patricia Bergero y colaboradores-,; construyeron una radiografía actualizada del complejo industrial oleaginoso y establecen una capacidad instalada total de aproximadamente 209.000 toneladas por día de industrialización, con una singular concentración en 20 fábricas de gran escala que totalizan 165.700 toneladas pordía de capacidad en lo que constituye el polo industrial mas grande en escala y moderno del mundo que explica el primer puesto exportador de la Argentina en harinas y aceites de soja.

En los últimos años se incorporo a este polo la planta Renova de 20.000 toneladas por día y en 2019 entró en operaciones su tercera línea de molienda llegando a 33.000 toneladas por día.

Resulta muy interesante el gráfico de la evolución de la capacidad instalada, su grado de ociosidad y la exportación de poroto, desde 1990.

Fuente BCR – Informe Semanal 1914 19/07/2019

Demuestra, a través de la línea de ociosidad de capacidad instalada, que la situación del complejo dista de ser brillante con niveles proyectados por la BCR para 2019 del 45% similares a los del 2018 con condiciones de cosechas muy distintas (fuerte sequíaen 2018 y más de 55 millones de toneladas en 2019)

Esto nos obliga a pensar sobre el posicionamiento futuro de la Argentina como exportador de productos industriales como harinas, aceites, biodiésel y glicerina o en su defecto, como poroto de soja preferentemente, en un escenario con una disputa comercial entre China y EE.UU. cuyos distintos capítulos generan desbalances en los principales proveedores de China (Brasil, la Argentina y EE.UU.) y los correspondientes efectos en sus respectivas industrias.

Una síntesis de la evolución de las exportaciones del complejo del primer semestre del 2019 nos muestra lo siguiente en cuanto a composición entre poroto de soja y los subproductos de la industrialización (incluyendo el biodiésel derivado del aceite de soja):

Fuente: RIA sobre la base de INDEC.

Queda claro entonces que la molienda de soja está cayendo así como las exportaciones agroindustriales y ha crecido la exportación de poroto por encima de los demás productos. Este camino de primarización –el regreso al obsoleto concepto de “granero del mundo”- debemos corregirlo rápidamente para evitar crisis de empleos y generación de divisas, y para alentar más inversiones y más acceso a mercados en condiciones de igualdad tributaria, de los que hoy carecemos dado que se cobran más derechos de exportación por tonelada procesada de soja en la Argentina que sin procesar.

Tenemos que aprovechar el camino del acuerdo del Mercosur con la UE y el relacionamiento de la Argentina con China, India, México, Corea y demás países para incrementar nuestras ventas de productos procesados, a través de una inserción inteligente de manera de preservar el trabajo argentino.