MERCADOS

Llegando a fin de año ¿Qué está viendo el mercado?

Los aumentos que vimos en los mercados en el año fueron más que importantes, si centramos nuestra atención en soja vemos que en Chicago la cotización de la oleaginosa creció cerca de un 41% desde agosto hasta el momento.

En las últimas semanas los precios llegaron a una pausa a la espera de nuevas noticias que convaliden el rally, en caso contrario el mercado reconocería que hemos alcanzado un techo.

La línea de los 1200 puntos en el mercado estadounidense no ha sido superada desde julio del 2014, teniendo en cuenta que la guerra comercial EEUU vs China hundió la oleaginosa a niveles mínimos históricos. Si miramos los factores técnicos entramos en una semana de definición sobre el futuro de los precios dependiendo si se rompe o no el techo mencionado.

En su último informe mensual, el USDA recortó levemente los stocks finales esperados para la campaña estadounidense dada la mayor demanda interna por crushing, aunque no en gran medida como para traccionar fuertemente el panorama de la oleaginosa luego del informe de principios de mes.

Si bien las compras chinas a EE.UU. se desaceleraron, continúan estando mes a mes por encima de años anteriores. En la última semana dicho dato publicado por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos, fue superior a lo que estimaban los analistas y en gran parte fue por destinos desconocidos que podrían ser China.

El gigante asiático, a modo de defensa redactó leyes para mantener reservas estratégicas de granos en sus provincias para no sólo depender menos del mercado externo sino enfriar las cotizaciones de la materia prima y poder volver a llevar sus márgenes de molienda, que cayeron fuertemente durante noviembre, a valores dentro de lo normal para la fecha en años anteriores.

En consecuencia, de la falta de nuevos negocios de China, exceptuando la última semana, sin un informe de oferta y demanda del USDA con grandes cambios, y con lluvias en Sudamérica que llevan un alivio a la sequía que afectó nuestras latitudes, los precios calmaron su fuerte impulso y lateralizan a espera de nuevas noticias alcistas.

En la última semana la oleaginosa se sostuvo con los embarques norteamericanos cumpliendo los compromisos de ventas, el crushing mensual de EE.UU. avanza en niveles récord y el índice de dólar tocando mínimos de dos años y medio.

El mercado se toma un descanso mientras rompe levemente los 1200 puntos y evalúa la posible continuidad o no, de acuerdo con como se desencadene el mercado. Si rompemos esta resistencia técnica volveremos a hablar en valores de soja que no vemos desde 2014, aunque debemos tener en cuenta que los fondos especulativos en Chicago están comprados en niveles elevados y cualquier susto que pueda sufrir la oleaginosa puede generar ventas por más que el mercado sea alcista en el mediano plazo.

Por el lado de Sudamérica surge la duda de cuánto podría caer la producción, el organismo norteamericano no realizó grandes recortes en su último informe, para Brasil mantiene la estimación de producción en 133 millones de toneladas mientras que en nuestro país recortó en un millón de toneladas y la estima en 50.

Independientemente de la estimación, el clima no lo convalida y “La Niña” se reafirma, por lo que continúan los temores presentes en el mercado. Según los modelos de pronósticos del IRI/CPC la anomalía de año Niño tendería al nivel neutral en el trimestre mayo-junio-julio del próximo año. Por lo que el déficit de precipitaciones y las altas temperaturas persistirán en los próximos meses.

Esto generó que Brasil sembrara tarde por lo que podría cosechar tarde, esta situación plantea la probabilidad de que Estados Unidos tenga que cubrir un mes más de compras chinas, que en un año normal la cosecha brasileña saldría al mercado.

En nuestro país, la siembra avanza a un ritmo similar que el año pasado, aunque la humedad superficial condiciona el avance de la siembra en amplios sectores del área agrícola nacional.

Con estos factores en cuenta el mercado estará monitoreando de cerca el climático sudamericano, por lo que no sería descabellado pensar que el USDA recorte la producción estimada para este hemisferio si la situación de sequía y temperaturas cálidas persiste durante el periodo de definición de rindes del cultivo.

Por último, por el lado de la comercialización local, la oferta continua muy retraída a pesar de los buenos precios, por lo que sería elevada la cantidad de toneladas que pasen de campaña ante la continuidad de la brecha cambiaria y según la Bolsa de Comercio de Rosario serían más de 10 mill. tt.. Además, en las últimas semanas se agrega las complicaciones de logística causada por el paro de aceiteros.

Por todo esto, tiempo de definiciones de precios se acercan en cuanto a factores fundamentales y técnicos en Chicago, mientras para nuestro país seguimos en un mercado climático, de brecha cambiaria y retracción de oferta.

Por Equipo Análisis de Mercado de FyO