LECHERIA

El balance sigue siendo rojo

Mas allá de la incipiente recuperación de la lecheria, los pequeños y medianos la siguen peleando. ¿Cómo sigue el Fideicomiso Lácteo Santafesino?

La producción cayó 12,7 por ciento en los últimos tres años y durante el año pasado cerraron 775 tambos. Según un informe del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda, desde el 2015 se destruyeron más de 4100 empleos en el sector.

El trabajo señala que la comercialización local de leche fluida se redujo 10 por ciento, con caídas en todos los años, ya que en el 2015 se comercializaron 1312 millones y cayendo a los 1186 millones durante 2018.

Según el informe de la UNDAV, las ventas internas de leche en polvo se redujeron 8,4 por ciento, las de leche chocolatada bajaron 6,4, la de postres lácteos cayeron 6,2, yogures 5,5 y de crema 4,2, entre otras, y la caída promedio durante el 2018 fue del 1,7 por ciento.

En ese marco, son los pequeños y medianos, tanto productores como fábricas, los mas afectados, y quienes buscan herramientas que les permitan seguir en la actividad.

Para ello, en Santa Fe se creó a fines del año pasado el Fideicomiso Lácteo Santafesino, en el que se involucró la provincia Santa Fe, a través del ministerio de la producción, para salir al rescate de algunas pequeñas y medianas fábricas, entre las que se encuentra la emblemática Cotar, toda una institución para la ciudad de Rosario y sus alrededores.

Así y todo, es relativo el éxito de la herramienta puesta en marcha, dado que la Cooperativa Cotar, uno de los principales fiduciantes, no logra enderezar sus finanzas, ni captar el volumen necesario de leche fluida para que la planta de calle Humberto Primo, en la zona norte de Rosario, funcione con relativa “normalidad”.